miércoles, 25 de junio de 2008

yo soy bea

CREER O NO CREER Martes 17 de junio de 2008
Queridos feonautas:Os escribo porque necesito contaros que ya nada de lo que haga o diga el Innombrable podrá hacerme cambiar de parecer, no quiero saber nada más. Solo había dos opciones entre las que tenía que escoger: creer o no creer, y después de todas las veces que me ha engañado, habría sido estúpida si le hubiese dado mi voto de confianza. Ya sé que siempre he dicho que a todo el mundo hay que darle una oportunidad, que no se puede juzgar a nadie sin contar con unos hechos que ratifiquen tu opinión, pero el Innombrable ha tenido miles de oportunidades para demostrarme quién es, y siempre ha terminado estropeándolo. Ahora que me siento más segura, más madura, creo que es mejor pasar página de una vez por todas. Podría recaer, sí, al fin y al cabo el Innombrable me sigue atrayendo, sigo pensando en él cada día, pero… ¿por qué arriesgarme? Me ha roto tantas veces el corazón que creo que una sola más sería la definitiva. Otro pequeño azote y mi corazón dejará de latir para siempre. Supongo que desde fuera las cosas se ven más fáciles, puede que incluso os parezca una rencorosa, pero no conozco otra manera de protegerme. No me puedo permitir volver a caer, ahora que parece que vuelvo a despegar. Feonautas, una editorial está interesada en publicar mi blog. Estoy tan emocionada que ahora mismo podría hacer tres triples mortales y caería de pie sobre la alfombra de mi habitación. Y todo esto es gracias a vosotros. Si no llega a haber nadie al otro lado, yo jamás habría seguido escribiendo este diario. Sin vuestros comentarios, jamás me habría inspirado para contaros todas mis peripecias en Bulevar 21. Habéis sido vosotros quienes me habéis guiado, cada día, en esta pequeña aventura. Gracias a todos. De corazón. Ahora os tengo que dejar porque necesito echarle una mano a Be con su curriculum. Sí, habéis leído bien, ella también ha cambiado. Quiere buscar trabajo, y no sabe ni por dónde empezar. Si os digo la verdad, yo tampoco sé muy bien cómo hacerlo, pero estoy segura de que entre las dos seguro que encontramos algo. Be se ha portado de maravilla conmigo y me siento en la obligación de hacer lo mismo con ella. Ha decidido lanzarse al mundo laboral sin miramientos después de mucho tiempo sin haber pegado palo al agua. Eso sí es ser valiente. Pero como he dicho al principio de esta entrada, tenemos dos opciones: creer o no creer, y yo creo plenamente en Be. Hasta mañana feonautas.

yo soy bea

¿MADRID O MIAMI? Miércoles 18 de junio de 2008
Queridos feonautas: Ayer os conté que una editorial estaba interesada en publicar mi blog. Hoy añado, que uno de los requisitos es que viaje con ellos hasta Miami y me quede allí durante un tiempo. Quieren traducir mis escritos al inglés. No puedo decir que la idea, como diría Florentino Fernández, no me congratule, pero marcharme fuera del país es algo que no me había planteado últimamente. Al terminar la carrera me imaginaba trabajando para una multinacional, cambiando de destino cada dos años, conociendo los lugares más exóticos de la esfera terrestre. Sin embargo, los acontecimientos fueron ocurriendo como una cadena. Termino carrera, máster, otro máster, Bulevar… ¿Cómo iba a abandonar mi primer puesto de trabajo? Además, ahora que me he acomodado, que tengo mi vida aquí, todos mis amigos… me cuesta imaginarme tan lejos. Pero supongo que todo es cuestión de mentalizarse. ¿Y qué mejor forma de cambiar de vida que cambiar de país? Parece que es el sino de los trabajadores de Bulevar, terminar cuanto más lejos de la revista, mejor. Chusa en el petrolero, la Barbi en Bollywood, y yo, en Miami. Es como si Bulevar 21 fuera una lanzadera hacia la conquista del resto del mundo. No quiero ni imaginar la cara que pondrá mi padre cuando le comente la oferta, probablemente me ate a la pata de la cama para que no pueda marcharme. Está acostumbrado a tenerme cerca y, aunque sé que Carol lo cuida con mucho cariño, se me empañan los ojos cada vez que me imagino tan lejos de él. Eso por no mencionar al Innombrable. Tomar esta decisión supone decirle adiós para siempre. El mundo es pequeño y a veces te sorprende, pero no creo que sea tan chistoso como para permitir que nuestros caminos se crucen en otro continente. Quién sabe, quizá estemos destinados a no volver a vernos jamás, o lo mismo, es la primera persona con la que tropiezo nada más poner un pie sobre suelo americano. Ojalá tuviera una bola de cristal que me dijera qué debo hacer, ojalá me permitiera ver mi vida de uno u otro modo y después elegir. Pero supongo que eso es lo que nos hace humanos, el hecho de tomar decisiones. Y cada pequeña elección es un reflejo de nosotros mismos como personas. El problema es que en mi reloj tan solo quedan los últimos granos de arena… Hasta mañana feonautas. Una fea obligada a decidir

yo soy bea

« ¿MADRID O MIAMI? Miércoles 18 de junio de 2008 Inicio PRÓXIMA PARADA: MIAMI Viernes 20 de junio de 2008 »
TIC-TAC, TIC-TAC… Jueves 19 de junio de 2008
Queridos feonautas:
Tic-tac, tic-tac… Se va agotando el tiempo y aún no he tomado una decisión. Sé que trasladarme a Miami podría brindarme muchas oportunidades en mi carrera profesional, y que precisamente ahora que me dispongo a dar un cambio radical a mi vida, la oferta me viene como anillo al dedo, pero las circunstancias ahora mismo no son las más favorecedoras para tomar una decisión. Hoy mismo he visto a Carol y a mi padre discutir como nunca. Según mi padre, ha sido una pelea doméstica, pero yo sé que no es así. La experiencia me ha enseñado a reconocer cuándo me engaña, cuándo me miente para tratar de protegerme, y esta vez es lo que estaba haciendo. ¿Quién se desgañita por cambiar de supermercado? Nadie. Ni siquiera mi padre. Entiendo que pueda estar susceptible, que la idea de imaginarme lejos de casa le haga estar más tenso, más irritable, pero Carol no se merece que la trate así. Desde que llegó a esta casa, no ha hecho más que traer alegría y buenos momentos. Ha sido la única mujer que ha aguantado el malhumor de mi padre, y es la única que sabe ponerle los puntos sobre las íes. Pero eso no significa que por eso Carmelo pueda abusar de su buen hacer. Yo sé que siempre ha sido un hombre de prontos y que las cosas que dice no las dice de corazón, pero tiene que aprender a ser más delicado. Espero que algún día se dé cuenta.
Por otro lado debo contaros que al fin Be ha encontrado un trabajo. En Bulevar. Si, bueno, aún no la han contratado pero Cayetana ha aceptado hacerle una prueba y estoy convencida de que mi nueva amiga logrará sorprender a todos con su entrevista. Para empezar, ha conseguido una cita con Zúñiga, un importantísimo científico de reconocido prestigio, que jamás concede entrevistas a medios no especializados. Por lo visto es un conocido de su familia, y ha accedido a charlar con ella. Ojalá estuviera en su lugar y pudiese partir de cero ahora mismo. Hacer mi primera prueba profesional, pero con todos los conocimientos que tengo ahora. Y cuando digo conocimientos, no me refiero a fórmulas ni datos numéricos, sino a saber lidiar con las sorpresas de la vida. Si pudiera volver atrás ahora mismo no necesitaría un giro de 180 grados en mi vida. No tendría la necesidad de debatirme entre Madrid o Miami en cuestión de horas…tic-tac, tic-tac... Hasta mañana feonautas. Una fea en tic-tac

yo soy bea ya casada

RECIÉN CASADOS Lunes 23 de junio de 2008
Queridos feonautas: Os escribe una mujer casada. En tan solo unas horas he visto cómo mis sueños se iban cumpliendo poco a poco, pero estoy despierta, y no puedo parar de pellizcarme para comprobarlo, para saber que todo lo que estoy viviendo no es fruto de mi fantasía y es verdad. Tan verdad que me atrevería a decir que todo lo que me ha sucedido hoy le da mil vueltas a cómo lo había imaginado en mi cabeza. Y es que la realidad siempre supera a la ficción, y de qué manera.Para empezar, hoy no era mi día, era el de mi amiga Be, pero ya sabéis, feonautas, dicen que de una boda sale otra, y así lo hemos demostrado Álvaro y yo. Lo nuestro ha sido un matrimonio exprés, hemos aprovechado todo lo que habían montado para mi amiga: el cura, los invitados… ¡hasta el banquete! No podéis imaginar lo feliz que me siento, lo orgullosa que enseño mi nueva alianza matrimonial. Quiero estar con él para siempre, y como bien he jurado hoy “hasta que la muerte nos separe”. Sabéis perfectamente que estoy enamorada hasta las trancas de él desde la primera vez que lo vi. Nunca en mi vida había sentido algo tan especial por alguien, nunca jamás había estado tan convencida de que él era la persona idónea con la que compartir el resto de mi vida. Y ahora, a pesar de todas las adversidades que hemos vivido, no me acuerdo de nada malo. Solo me vienen los buenos recuerdos: la primera vez que lo vi, la primera vez que me tocó, la primera vez que nos besamos… es lo que llaman memoria selectiva. Y la mía se ha encargado de hacer un buen trabajo. Pero no todo iban a ser alegrías… también me entristece tener que despedirme de todos mis compañeros y amigos. Se me parte el corazón de pensar que ya no volveré a Bulevar, incluso me entristece saber que nunca más veré a Don Diego. En el fondo, siento lástima por él. No creo que sea mala persona, simplemente la vida le ha hecho así. Ojalá algún día él pudiera ser tan feliz como nosotros, ojalá todos vosotros podáis serlo. Ahora tengo que despedirme, porque me espera mi marido (qué bien suena eso) para partir la tarta… Hasta mañana feonautas. Una bea casada

yo soy bea despedida de beatriz perez pinzon

HASTA SIEMPRE, FEONAUTAS
Queridos feonautas: Me da mucha pena decirlo, pero… estas son las últimas letras que escribo. Sin vosotros probablemente esta boda nunca se habría producido. Ahora mismo yo estaría tirada por alguna carretera de mala muerte haciendo autostop y montándome en el primer coche que pasara suplicando que no parara hasta agotar el combustible, cualquier cosa con tal de escapar de mi vida anterior. Sin embargo, y gracias a vosotros, ahora soy una mujer casada, con un eufórico futuro por delante y con dos billetes a París bajo el brazo. Si, feonautas, mi amado me ha sorprendido con una luna de miel en la ciudad del amor. ¿No es fantástico? Quiero daros las gracias por todos esos momentos difíciles en los que me habéis apoyado, por todos esos comentarios llenos de cariño que me hicieron levantarme una y otra vez cuando la vida no dejaba de ponerme la zancadilla. Por todos vosotros que lleváis ahí desde el principio: Raquelilla, Katha, Jurasic, Noa, Susibi, Aislyn, Bea, Rosa, Montse, Rosann y muchos más (seguro que se me escapan algunos y cuando me acuerde me tiraré de los pelos por no haberos incluido, pero daros por nombrados. Que vuestro nombre no esté en la lista no significa que no esté en mi corazón). También por todos los que os habéis ido incorporando estos últimos días van estas letras. Es una pena saber que a la mayoría no vaya a conoceros nunca, pero me consuela saber que existe gente como vosotros en el mundo. Gente que está ahí para lo bueno y para lo malo. Vosotros me habéis hecho crecer como persona y eso no lo olvidaré jamás. Por muy lejos que me vaya de aquí, nunca dejaré de ser una feonauta, ni vosotros tampoco. Y es que eso, como la sangre, es algo que se lleva dentro, en el corazón.Debo despedirme ya, el avión a París sale en unos minutos. Espero que todos vosotros tengáis una vida tan maravillosa como la que voy a tener yo, y que nunca cometáis el error que yo estuve a punto de cometer: abandonar al hombre de mi vida. Si hay una cosa que puede hacer que el mundo, por muy malo que sea, sea un poquito mejor, eso es el amor. No existe nada más: ni la salud, ni el dinero, ni el poder… nada es comparable al amor. Así que ese es mi pequeño consejo para vosotros: escuchad siempre a vuestro corazón. Ahora sí, amigos, debo irme. Os deseo lo mejor. Ojalá algún día volvamos a encontrarnos. Os quiero, de corazón. Hasta siempre feonautas. Una bea vuestra para siempre.

jueves, 12 de junio de 2008

yo soy bea

OTRO RIDÍCULO ESPANTOSO MÁS… Viernes 30 de mayo de 2008
Queridos feonautas: En estos momentos me siento la persona más estúpida sobre la faz de la tierra. ¿Cómo es posible que haya metido la pata de esta manera? Tenía tantas ganas de casarme con el Innombrable, había imaginado tantas veces en mi cabeza que algún día terminaría pidiéndome matrimonio, que me lo he inventado todo. Si, feonautas, todo lo que os conté ayer no era más que una ridícula fantasía que solo podía habérsele ocurrido a alguien como yo. Ni mi amado me ha pedido matrimonio, ni este velo que llevo puesto me corresponde. Todo ha sido una confusión, y vaya confusión. No me digáis que no es casualidad que mi novio se vaya de viaje a Milán, y a mí me llegue un paquete del mismo lugar. Y lo mejor de todo, que ese paquete resulte ser precisamente un vestido de novia. ¿Es casualidad o no? ¿Cómo iba a imaginarme que era para otra persona? Si pudiera volver atrás daría lo que fuera para, por lo menos, haber abierto la puerta sin el velo sobre la cabeza. Pero con lo que me ha costado colocarlo… ¿Cómo os quedaríais vosotros si una desconocida os abre la puerta con vuestro traje de novia puesto? ¿Flipando, no? Pues así se ha debido de quedar la verdadera Beatriz, la Beatriz a la que iba destinado este vestido. Menos mal que es una chica agradable, y se lo ha tomado de maravilla porque cualquier otra me habría arrancado el velo de un solo intento, y con toda la razón del mundo. Un vestido de novia es algo tan personal, tan privado, tan de uno mismo… A mí no me gustaría que nadie se probara mi vestido antes que yo, y mucho menos una demente desconocida. Bastante tengo con ser fea, pero… ¿cómo puedo ser tan ridícula? ¿Por qué iba el Innombrable a pedirme matrimonio de esta forma? ¿Apenas llevamos dos días juntos y yo ya esperaba que me jurara amor eterno? Aunque supongo que las cosas podrían haber sido peor, ¿os imagináis que llego a llamarle para darle las gracias? O lo que es peor… ¿para decirle “sí quiero”? Se habría quedado tan sumamente sobrecogido que ahora mismo estaría batiendo el récord de los mil metros lisos sin rumbo alguno. Le bastaría con dejarme a mí atrás, con alejarse. Y no es para menos. He visto tantas películas románticas que incluso he llegado a creerme que soy un personaje de ficción, debería mirármelo ¿verdad? Voy a tumbarme un rato en la cama mientras recuerdo mi última aportación a la lista de los ridículos más espantosos…. Hasta mañana feonautas. Una fea ridícula

yo soy bea

HUNDIDA Lunes 2 de junio de 2008
Be y yo nos hemos vuelto inseparables. ¿Que quién es Be? Be es la chica del vestido de novia que llegó a mi casa, sí, “el vestido”, el que pensé que mi amado me había enviado de Milán pidiéndome matrimonio… Resulta que Be, es una de mis fieles feonautas, y aunque no lo parezca, tenemos muchas cosas en común. Ella es alta, guapa y dulce, y yo bajita, delgaducha e insoportable. Pero no importa. Somos iguales por dentro, ella es una chica lista, muy agradable y yo trato de serlo. Las dos tenemos un problema con nuestro físico: yo por ser demasiado fea, ella por ser demasiado guapa. Dice que la gente le juzga sin conocerla, se la imaginan como la típica rubia tontita, solo por ser guapa. Pero solo en un día Be me ha demostrado que es mucho más. Es una chica valiente, no sabéis cómo se ha puesto cuando el Cara Acelga nos ha insultado, he tenido que agarrarla o se lo comía con patatas… La verdad es que la presencia de Be ha llegado en el mejor momento. Últimamente no le veo el pelo demasiado a Santi y estoy un poco desaparecida en general de mi casa. Me había centrado tanto en el Innombrable, que otra vez más he dejado lo más importante de lado… amigos y familia. Total, para nada porque el Innombrable ha vuelto a jugármela. Me entran incluso náuseas cada vez que lo recuerdo. Ha vuelto a utilizarme, una vez más. Lo que más me duele de todo esto es que sus artimañas ya no tienen límite. Es como si me odiara, como si quisiera terminar conmigo de un disgusto. Y os puedo asegurar que es el disgusto más grande que me he llevado en mi vida. Y eso que me he llevado unos cuantos… Bueno, no hace falta que los recuerde, vosotros, mis amigos, siempre habéis estado ahí para leerlos y aconsejarme. Pero esta vez no hay consejos que valgan, no estoy preparada para leer nada sobre lo que acaba de pasar. Necesito mentalizarme, creer que lo que el Innombrable acaba de decirme no ha sido una pesadilla. Porque un mal sueño es lo más parecido a lo que me acaba de pasar. Esta es mi caída definitiva, ya no hay nada en este mundo que pueda consolarme: nada. Y eso es lo peor que puede pasarle a alguien, no tener ni un pequeño ápice de esperanza. Y yo me estoy hundiendo lentamente en un pozo sin fondo, ojalá alguien me saque de aquí. Hasta mañana feonautas. Una fea hundida en la miseria

yo soy bea

HASTA SIEMPRE FEONAUTAS Martes 3 de junio de 2008
Queridos feonautas:Apenas puedo teclear en el ordenador. Estoy tan sumamente destrozada que he perdido la movilidad en cada una de mis articulaciones. Es en estos momentos de flaqueza cuando más echo de menos a mi madre. Llevo sufriendo el escarnio público desde que apenas tenía seis años, la diferencia es que entonces ella estaba allí para consolarme. Mi madre siempre tenía las palabras apropiadas, siempre decía lo que tenía que decir para hacerme sentir mejor. Si una cosa aprendí de ella, es que cuando uno se cae tiene que volver a levantarse, que hay que enfrentarse a los problemas de la vida con la cabeza bien alta. Mi padre ha tratado siempre de protegerme al fin y al cabo soy su niña, su única niña. Sin embargo, por mucho que lo haya intentado, por mucho que haya tratado de mantenerme al margen de las maldades del mundo, yo tengo una vida propia, y yo solita me he metido en el barro hasta las cejas, y supongo que eso significa que yo misma debo salir de él…
Feoanutas, puede que mi madre no esté aquí físicamente, pero de algún modo yo la siento a mi lado, y pienso hacer todo lo que me enseñó. Ha llegado la hora de coger el toro por los cuernos. Aunque haya sido un golpe atroz y el Innombrable sea más innombrable que nunca, es inútil compadecerse. Ya me he lamido las heridas, toca levantarse y seguir adelante, creedme sé lo que tengo que hacer. En esta vida se aprende sufriendo y voy a empezar a aplicar mis conocimientos. Se acabó confiar en quien no lo merece, se acabó dar lo mejor de mí para recibir a cambio solo desprecio y dolor. Ahora es momento de emprender un nuevo camino. Feonautas, no os preocupéis por mí. Sé muy bien lo que tengo que hacer. Pero eso no significa que tenga que enterrar por completo esta etapa. No todo han sido sinsabores y decepciones, he conocido seres humanos extraordinarios que me han querido y apoyado, a los que siempre llevaré en mi corazón, junto con las lecciones que me enseñaron. La alegría de vivir, la solidaridad, la capacidad de superación, la dignidad, y sobre todo, el inmenso valor de la amistad, sin la que nada en esta vida tendría sentido. Feonautas, gracias por estar siempre ahí, pendientes de mis alegrías y de mis penas. Ha llegado el momento de mi despedida, algún día tienen que acabar las cosas viejas, para que puedan comenzar las nuevas. Hoy es ese día: el último de esta historia. Estas son las últimas líneas que escribo en mi blog. Hasta siempre feonautas. Una fea destrozada

yo soy bea

PELILLOS A LA MAR Viernes 6 de junio de 2008
He tomado una decisión: quiero cambiar. Es cierto que siempre he defendido que la belleza está en el interior y que nuestro aspecto no es más que un mero adorno superficial, pero ya no tengo duda alguna: quiero estar adornada. Tan adornada como un árbol de navidad el 25 de diciembre. Y esto no significa que vaya a plantarme un lazo en la cabeza y a pintarme como una puerta. Simplemente quiero cuidar un poquito mi imagen, tampoco pido tanto, con parecerme un poco más a un cuadro de Velázquez que a uno de Picasso, me conformo. Quiero ser una persona normal, que la gente no tenga que mirarme dos veces para confirmar que es cierto, que realmente existe una persona tan fea como yo. Quiero dejar de ser un esperpento y convertirme en un obelisco de sobriedad y elegancia. ¿Creéis que algún día lo conseguiré? Al menos esta vez puedo contar con el criterio de mi gran amiga Be, que qué queréis que os diga, me inspira bastante seguridad. Yo sé que Chali lo intentó con todas sus fuerzas y que trató de que destacara en el concurso de misses (he de decir que consiguió su cometido, pero no como ella había esperado…) pero Be me conoce a la perfección y sabe que no quiero ni florituras ni mucho menos llamar la atención, solo convertirme en algo fácil de ver, que no dañe los ojos. Pero lo más importante es que si ya me propuesto cambiar de vida, ¿por qué no empezar cambiando de imagen? Si me arrepiento siempre estaré a tiempo de recolocarme las gafas. El aparato no sé si podré quitármelo, supongo que dependerá del dentista, pero me haría tanta ilusión… sentir mis dientes otra vez, poder acariciarlos con la lengua, y sobre todo, poder sonreír sin complejos. Feonautas, ha llegado el momento, dentro de poco estará ante vosotros una nueva Bea… una Bea normal y corriente que no irá llamando la atención por ser más fea que picio, ni por ninguna otra cosa. Simplemente pasaré desapercibida, que es lo que más ansío. Tengo tantas ganas de cambiar que ya me he arrancado mi primer pelo de las cejas… eso sí, con lo mal que lo he pasado, no sé si tendré fuerzas para extirpar las decenas de pelos restantes, ¿o debería decir cientos? Si, feonautas, tengo las cejas más pobladas que el bigote de Groucho Marx, pero lo importante es que ya se ha producido mi primer cambio. Soy una nueva Bea, con un pelo menos en las cejas. Ya comienzo a sentirme diferente. Hasta mañana feonautas. Una fea con un pelo menos.

yo soy bea

PUNTO Y FINAL. Lunes 9 de junio de 2008
Queridos feonautas: Ha llegado el momento. Después de todas las lágrimas que he derramado durante estos años por mi desgraciado físico, al fin he decidido poner punto y final a una de las mayores adversidades con las que he vivido desde que nací. No prometo nada fuera de lo normal, no quiero llamar la atención, ni ser una persona espectacular pero me siento orgullosa de haber dado el primer paso para convertirme en alguien diferente, alguien un poco menos feo, alguien normal. Siempre he renegado de mi falta de encanto por motivos obvios. Vosotros, feonautas, seréis probablemente los mayores conocedores de mis complejos, de mis miedos, de mi mundo en general. Siento que habéis sido un apoyo enorme durante este tiempo, y que sin vosotros probablemente, jamás habría abierto los ojos, nunca habría dado este paso tan importante como el de arrancarme el aparato de los dientes o encerrar mis prehistóricas gafas en un viejo cajón para siempre. Lo habéis hecho todo a través de Be. Ella ha sido una representante, la mano ejecutora de lo que a vosotros os habría encantado hacer por mí: regalarme un trocito de felicidad de una forma que jamás habría imaginado. Sabéis que nunca le he dado importancia al aspecto físico de nadie, pero lo que acabo de averiguar es que conmigo jamás he sido tan tolerante. Me repugnaba mirarme al espejo, imaginarme mi cara sin mis aparatosas gafas, mi cuerpo aprisionado en ropas ceñidas… cualquier cosa era mejor que enseñar mi verdadero yo. Pero ahora eso lo he superado. Aún no me he visto en ningún espejo, ni siquiera sé si estaré favorecida o peor aún de lo que ya estaba, pero no se trata de cómo me vea, sino de cómo me sienta. Y os puedo asegurar, que me siento mucho mejor que nunca en toda mi vida. Por primera vez me siento segura conmigo misma. No necesito que nadie me halague, que me digan lo mucho que he cambiado, porque soy yo la única que puede corroborarlo. El verdadero cambio está en mi interior, en mi capacidad de aceptarme tal y como soy. Y eso es lo más importante que he aprendido hoy, que ni el colorete, ni los tacones, ni el esmalte de uñas, me harán sentir mejor sin un mínimo de predisposición. Y, puedo aseguraros, que con esmalte o sin él, hoy me siento como nunca antes me había sentido. Hasta mañana feonautas. Una fea que se siente guapa

yo soy bea

EN PARO Miércoles 11 de junio de 2008
Queridos feonautas: En primer lugar quería dar las gracias a todos por la cantidad de piropos y cosas bonitas que he estado leyendo en vuestros comentarios. Jamás pensé que este cambio pudiera provocar tanto revuelo, y he visto que muchos de vosotros sois nuevos lectores. Me alegro mucho de que mi blog no haya perdido interés y de que cada día seáis más quienes formáis parte de él. Al fin y al cabo, sin este blog, y sin todos vosotros, jamás habría tomado ni la mitad de decisiones que he ido tomando a lo largo de mi vida en Bulevar. Ni siquiera la de cambiar de imagen. Al fin me he deshecho de mis horribles harapos. Sí, lo que algún día fue mi ropa, ahora ha pasado a manos de otra gente más necesitada. Mentiría si dijese que no he sentido lástima al donarlas a la parroquia, al fin y al cabo esos trapos me han acompañado desde que tengo memoria (y mi talla actual, claro, que debe de ser la misma desde los trece años)…A lo que no me acostumbro aún es a no tener que madrugar todas las mañanas. Me despierto temprano, porque es difícil desarraigar una costumbre tan cotidiana, pero me siento inútil. No tengo a dónde ir ni nada que hacer… solo buscar trabajo para poder, precisamente, terminar con este tiempo muerto de una vez por todas. Pensaba que me vendría bien un respiro, que salir de Bulevar era un paso acertado, que no me arrepentiría en absoluto. Pero lo primero que hago al despertar, y lo último antes de acostarme es dedicar unos minutos, incluso puede que alguna hora completa, a pensar en mi ex empresa. Me gusta recordar mi vida allí, a mis amigos, a los que acostumbrada a ver todos los días, echo muchísimo de menos. Quizá debería acercarme alguna vez, ya sabéis, a saludar. Pero de solo pensar que podría encontrarme con el Cara Acelga, o lo que es peor, con el Innombrable, se me pone la piel de gallina. ¿Qué será de él, feonautas? ¿Seguirá ejerciendo de lacayo de esa sabandija engominada? ¿Habrán conseguido todos mis amigos plantar cara a Don Diego ahora que son accionistas? Estoy convencida que regalarles mis acciones es lo mejor que he hecho en mucho tiempo, porque sé que ellos, mejor que nadie, sabrán llevar la revista como se merece. Harán que Bulevar vuelve a ser una de las publicaciones más punteras de nuestro país. Ahora, debería escribir menos y leer más, porque como no encuentre un trabajo pronto, me corto las venas… Voy a echarle un ojo al periódico. Hasta mañana feonautas. Una bea parada

yo soy bea

A CONCURSO Jueves 12 de junio de 2008
Queridos feonautas: Como sabéis esta vida se mueve por contactos, y aunque yo sé que estoy sobradamente preparada para desempañar un buen trabajo en cualquier empresa, parece que no existe ningún puesto idóneo para mí. Todos son para gente menos cualificada, y he de decir que no me importa en absoluto empezar de más abajo, el problema es que son los propios empresarios los que me ponen el filtro. He llamado a todo tipo de empresas: agrícolas, industriales, incluso llegué a llamar a un hipermercado. Pero nada. Solo una persona me ha logrado devolver la esperanza: Be. Mi amiga se ha convertido en mi ángel de la guarda. Ha conseguido que su madre, presidenta de la multinacional Aceros Berlanga, me haga una entrevista. Ha sido un encuentro algo atípico, ya que he tenido que defender mis posibilidades en tan solo tres minutos. Creo que lo he hecho bien, que he dejado el pabellón bien alto, pero me pide algo más. Algo que no conseguiré jamás: una carta de recomendación de mi último superior. Eso no sería ningún problema si mi superior no hubiese sido precisamente el Cara Acelga. ¿Os imagináis qué clase de cosas escribiría si le diesen una hoja en blanco y le animaran a hablar sobre mí? Como mucho podría recomendar que me ahogaran en un estanque o que me prendieran fuego al verme aparecer. Nada bueno puede salir de la pluma de este señor, por lo que mis esperanzas vuelven a desplomarse una vez más. Agradezco de corazón todo lo que Be está haciendo por mí, pero esta vez creo que ha metido un poco la pata… Por lo visto ha presentado este blog a un concurso de la revista. Quizá debería dejar de llamar a la gente y a la empresa por su nombre antes de que empiecen a leerlo… Quizá debería dejar de escribir. Para mí, hasta el momento, este había sido una esfera de intimidad. Escribo mis sentimientos, sabiendo que solamente vosotros, mis queridos feonautas, los vais a leer. No me gustaría que este blog se convirtiera en un acontecimiento de masas. Y presentándolo a concurso se va a convertir precisamente en eso. Ni siquiera mis mejores amigos conocen su existencia, y es un poco bizarro que se enteren de esta manera. Pero supongo que con la cantidad de gente que se habrá presentado, sería demasiada casualidad que el premio me lo llevara yo, así que no hay de qué preocuparse. Hasta mañana feonautas. Una bea bloguera