miércoles, 25 de junio de 2008

yo soy bea

CREER O NO CREER Martes 17 de junio de 2008
Queridos feonautas:Os escribo porque necesito contaros que ya nada de lo que haga o diga el Innombrable podrá hacerme cambiar de parecer, no quiero saber nada más. Solo había dos opciones entre las que tenía que escoger: creer o no creer, y después de todas las veces que me ha engañado, habría sido estúpida si le hubiese dado mi voto de confianza. Ya sé que siempre he dicho que a todo el mundo hay que darle una oportunidad, que no se puede juzgar a nadie sin contar con unos hechos que ratifiquen tu opinión, pero el Innombrable ha tenido miles de oportunidades para demostrarme quién es, y siempre ha terminado estropeándolo. Ahora que me siento más segura, más madura, creo que es mejor pasar página de una vez por todas. Podría recaer, sí, al fin y al cabo el Innombrable me sigue atrayendo, sigo pensando en él cada día, pero… ¿por qué arriesgarme? Me ha roto tantas veces el corazón que creo que una sola más sería la definitiva. Otro pequeño azote y mi corazón dejará de latir para siempre. Supongo que desde fuera las cosas se ven más fáciles, puede que incluso os parezca una rencorosa, pero no conozco otra manera de protegerme. No me puedo permitir volver a caer, ahora que parece que vuelvo a despegar. Feonautas, una editorial está interesada en publicar mi blog. Estoy tan emocionada que ahora mismo podría hacer tres triples mortales y caería de pie sobre la alfombra de mi habitación. Y todo esto es gracias a vosotros. Si no llega a haber nadie al otro lado, yo jamás habría seguido escribiendo este diario. Sin vuestros comentarios, jamás me habría inspirado para contaros todas mis peripecias en Bulevar 21. Habéis sido vosotros quienes me habéis guiado, cada día, en esta pequeña aventura. Gracias a todos. De corazón. Ahora os tengo que dejar porque necesito echarle una mano a Be con su curriculum. Sí, habéis leído bien, ella también ha cambiado. Quiere buscar trabajo, y no sabe ni por dónde empezar. Si os digo la verdad, yo tampoco sé muy bien cómo hacerlo, pero estoy segura de que entre las dos seguro que encontramos algo. Be se ha portado de maravilla conmigo y me siento en la obligación de hacer lo mismo con ella. Ha decidido lanzarse al mundo laboral sin miramientos después de mucho tiempo sin haber pegado palo al agua. Eso sí es ser valiente. Pero como he dicho al principio de esta entrada, tenemos dos opciones: creer o no creer, y yo creo plenamente en Be. Hasta mañana feonautas.

No hay comentarios: